En este artículo platicaremos de qué son las botanas ancestrales y por qué vale la pena que las incorpores a tu menú. No solo rescatarás algunas de nuestras raíces culinarias, sino que atraerás a esos comensales que buscan sabores únicos sin complicar la operación de tu restaurante.
¡Aquí te contamos cómo incorporar de forma fácil estos ingredientes con historia a tus platillos!

¿Qué son las botanas ancestrales y por qué recuperarlas
Las botanas ancestrales son ingredientes y preparaciones que han formado parte de la dieta mexicana durante siglos. A menudo provienen directamente del campo, con un procesamiento mínimo. Entonces, además de deliciosas, también suelen ser muy nutritivas. Por eso las consideramos como botanas saludables.
Estas preparaciones ofrecen sabores auténticos y una conexión profunda con nuestras memorias culinarias. Ésta es una experiencia muy valorada por comensales nacionales e internacionales.
Como su nombre lo indica, las botanas ancestrales se pueden servir como aperitivo, aunque igual funcionan como guarniciones, rellenos o parte de platillos principales.
Ingredientes con historia: del campo a la mesa moderna
Cuando hablamos de ingredientes con historia nos referimos a aquellos productos que desde tiempos prehispánicos hemos sabido incorporar a los platillos de nuestras mesas.
Las botanas ancestrales provienen de prácticas de recolección y preparación que se han perfeccionado a lo largo del tiempo. Llevar estos ingredientes del campo a la mesa moderna es una forma de honrar ese legado y demostrar un compromiso con la autenticidad y la calidad de tus productos.
Dentro de los ingredientes más comunes en la preparación de botanas ancestrales están: el aguacate, el chile, el frijol, algunas frutas y vegetales. Pero, sin duda, los más interesantes son esa enorme variedad de insectos que nos regala la tierra mexicana. Y tú, ¿ya usas estos ingredientes en tus platillos?
La importancia del rescate culinario en la cocina profesional
En un mercado donde la originalidad es cada vez más apreciada, el rescate culinario de ingredientes como las botanas ancestrales puede ser un diferenciador poderoso para tu negocio.
Hoy, ofrecer platillos que incorporan los sabores de nuestras raíces se convierte en una herramienta de venta muy atractiva. Esto resulta de gran valor para los comensales interesados en la riqueza de la gastronomía mexicana.
El primer paso para este rescate culinario a través de las botanas ancestrales es conocerlas. ¡Sigue leyendo que te lo contamos todo!

5 botanas ancestrales que son fáciles de añadir a tu menú
Como ya te habrás imaginado, existe una enorme variedad de platillos considerados como botanas ancestrales. Pero, los más interesantes son aquellos preparados con insectos.
Para que los conozcas mejor y te inspires a incorporar estos ingredientes en tus platillos mexicanos más famosos, aquí te dejamos esas 5 botanas ancestrales que con la preparación adecuada pueden convertirse en las estrellas de tu menú.
1. Chapulines asados o fritos
Los chapulines asados o fritos son una botana crujiente y llena de sabor. Son especialmente populares en Oaxaca, aunque se consumen en varios estados del país. Se preparan fritos o asados.
El sabor ligeramente terroso de los chapulines asados o fritos combina muy bien con el ajo, limón y un poco de picante. Están disponibles desde las primeras lluvias hasta principios del invierno.
2. Chinicuiles
Los chinicuiles, también conocidos como gusanos rojos de maguey, son muy comunes en la zona centro del país. Se comen fritos o asados al comal, o también deshidratados. Con ellos tendrás una botana ancestral de sabor bastante terroso.
Esta variedad de color rojo es la que se utiliza para preparar la famosa sal de gusano. Los chinicuiles son, también, el elemento estrella en el mezcal de gusano.
¿Cómo utilizarlos en tus botanas ancestrales? En taquitos, con totopos y guacamole o para preparar una salsa roja a base de jitomate.
3. Hormigas chicatanas
Las chicatanas son una variedad de hormigas voladoras. Se recolectan durante la temporada de lluvia. Abundan durante mayo, junio y julio a lo largo del país.
El sabor de las chicatanas es intenso y un poco picante, para algunos tienen una nota suave a cacahuate tostado. Se comen en taco, asadas, molidas en salsa, caldo o en chilmole.
4. Escamoles de temporada
Los escamoles, o “hueva de hormiga”, son considerados todo un manjar prehispánico. Son tan apreciados que se les conoce como “el caviar mexicano”. Solo están disponibles durante los meses de marzo y abril.
Su sabor es muy delicado y tienen una textura cremosa. Los escamoles suelen prepararse salteados en mantequilla con epasote. Con ellos se preparan tacos, tostadas y quesadillas.
5. Huitlacoche, la opción vegana
Todos los insectos que ya mencionamos son una fuente importante de proteína; sin embargo, sabemos que tendrás comensales que preferirán una opción vegana. En ese caso, el huitlacoche es la botana ancestral perfecta.
El huitlacoche, o “la trufa mexicana”, es un hongo que crece en las mazorcas de maíz. Su sabor es un poco amargo y ahumado, pero ligero. Mientras que su textura es suave y su color, interesante. Es excelente en rellenos de antojitos, crepas, en sopas, como parte de guisos y salsas.

¿Cómo servir estas botanas ancestrales?
Ahora que ya conociste nuestras 5 botanas ancestrales preferidas, es momento de que te compartamos nuestros mejores tips para servirlas.
Empecemos por esto: la clave para integrar con éxito las botanas ancestrales a tu menú está presentarlas de forma atractiva y asegurarte de que el comensal sepa sobre su origen y sabor único.
La mayoría de las veces, los chapulines, chinicuiles, chicatanas, escamoles y el huitlacoche, se sirven en tacos. Después de tostarse, freírse o asarse se les agregan unas gotas de limón y salsa o guacamole. A veces se aromatizan con otras hierbas, un poco de ajo y cebolla. Y si tienes un bar o cantina, ¡son ideales para la popular happy hour!
Aunque esto ya suena bastante bien, debes saber que los tacos no son la única opción para servir tus botanas ancestrales. Por eso, debes conocer estas dos opciones:
Tlacoyos con botanas ancestrales
Los tlacoyos son la base perfecta para las botanas ancestrales. Qué mejor acompañante que un poco de masa de maíz rellena de frijol, haba, chicharrón prensado, papa o requesón. Y por encima, un poco de nuestras botanas ancestrales.
Imagina unos tlacoyos bañados en salsa de chapulines y queso fresco, o con hormigas chicatanas tostadas y un toque de aguacate.
Tostadas de maíz
Ahora, si lo tuyo es una opción más crujiente, no hay nada mejor que las tostadas de maíz como vehículo para estas botanas ancestrales.
Puedes ofrecer tostadas de maíz con escamoles a la mantequilla o una con base de frijoles y un guisado de chinicuiles. Incluso podrías preparar una deliciosa salsa de huitlacoche como dip para tus tostadas de maíz y colocarlo en tus mesas como cortesía.
Saca partido de las botanas ancestrales para dar valor al menú
En tacos, tlacoyos o tostadas… No importa cómo elijas servir tus botanas ancestrales. Al incorporarlas en tu menú, ofrecerás sabores auténticos que enamorarán a tus comensales. Todo esto mientras contribuyes al rescate de la herencia culinaria de México. ¡Atrévete a explorar estos tesoros gastronómicos!